El proyecto Miradas Furtivas plantea una mirada voyeur, ajena, que irrumpe en los habitáculos privados de cada individuo.La intimidad, la mirada constante, la curiosidad por lo ajeno, son algunos de los elementos que nos sitúan en este trabajo.

La ventana es el elemento característico de mi obra. El observador forma parte de ésta al tener un papel activo de consumidor de la privacidad a través de las ventanas. Esos instantes de intimidad dentro de la obra se ven interrumpidos por la textura y la transparencia del papel vegetal.

La arquitectura está caracterizada por estructuras y espacios al alcance de la vista de todo y de todos, donde los grandes ventanales y las cristaleras son el escaparate de cada persona.Podemos pasar de simples observadores de la obra a convertirnos en voyeurs que introducen su mirada en cada ventana.

La intimidad, la mirada constante, la curiosidad por lo ajeno son algunos de los elementos esenciales en este trabajo.

Combinando diferentes técnicas como el óleo, pintura acrilica, transferencias, fotografías y materia intento provocar en el espectador esa actitud vouyerista.

Trabajos realizados en torno a la ciudad de San Francisco (California) que forman parte de la colección de la Cervecería San Francisco, Talavera de la Reina.